Borrar

Última cita con los Rolling Stones Entrevista «Somos unos héroes 'fake'»

En el año 62 de su larga historia, la banda de rock de más éxito del mundo publica disco nuevo: Hackney Diamonds. Nadie en su entorno dice que vaya a ser el último, pero con tipos que rondan los 80 años... Mick Jagger, Keith Richards y Ron Wood nos reciben en Londres.

Viernes, 13 de Octubre 2023, 10:57h

Tiempo de lectura: 9 min

A veces, las grandes verdades son muy simples. Ron Wood, de 75 años y guitarrista de The Rolling Stones, nos recibe en la habitación de un hotel londinense. No tiene mucho tiempo, hay un álbum que promocionar y periodistas de medio mundo a los que atender. Cada uno disponemos de diez minutos solo.


–¿Por qué otro disco de los Stones?

Wood lanza una mirada de incredulidad al oír la pregunta. Luego responde.

–Tenemos que perpetuar el mensaje.

–¿Y cuál es el mensaje?

–¡La banda! El mensaje es la banda. ¡Nadie ha logrado nada parecido, los Stones existen desde hace más de 60 años! Estoy muy contento de seguir haciendo lo que hacemos. ¡Entramos en terreno desconocido!

Mick Jagger, de 80 años, y Keith Richards, de 79, también participan en la promoción. El día anterior, los tres hablaron del nuevo disco con el presentador estadounidense Jimmy Fallon. Uno de los momentos memorables de la entrevista fue cuando Fallon les preguntó cuál era el secreto para aguantar tanto tiempo juntos, y Richards murmuró: «No hablar demasiado entre nosotros».

¿El secreto para haber aguantado tanto? «No hablar demasiado entre nosotros»

Keith Richards

Hoy, la banda ha reservado un piso entero en un hotel de lujo. Del tamaño de las suites se deducen muchas cosas sobre la jerarquía dentro del grupo. La de Jagger es enorme, la de Wood es bastante más pequeña y la de Richards está a medio camino.

Nadie dice abiertamente que Hackney diamonds vaya a ser el último álbum de los Stones, pero con tipos de más de 80 años nunca se sabe... por mucho que luzcan indestructibles durante las entrevistas. Jagger muestra la vitalidad de un hombre de 50 años. Wood, que dejó de beber ya de jubilado, ha venido con su mujer y se la presenta a todos los periodistas; es la productora de teatro Sally Humphreys, con quien tuvo gemelos en 2016. Y Richards... Richards es el hombre que ha escapado más veces de las garras de la muerte.

En realidad, el álbum tenía que ser sobre la ira, cuenta Jagger. Esa era la idea, confirma Wood.

alternative text
Cristales rotos. El nuevo disco se titula Hackney diamonds, expresión que en los bajos fondos de Londres se usa para referirse a esos cristales que quedan sobre la acera cuando alguien rompe un escaparate para robar.

–¿Vivimos tiempos airados?

–Recuerdo tiempos mucho más airados. Pero sí. Hoy hay mucha gente enfadada con el mundo en el que vivimos.

El caso es que la idea de centrarlo en la ira no les duró mucho. Escribió 25 canciones, dice Jagger, y las que quedaron son las que hablan de relaciones personales. Quizá porque Hackney diamonds es el primer disco tras la muerte de Charlie Watts, el batería de la banda, fallecido en 2021. Un hombre del que no se sabía mucho. Estuvo toda su vida casado con la misma mujer y nunca apareció en la prensa sensacionalista, salvo en los años ochenta, cuando durante un tiempo cayó en la heroína. Watts venía del jazz, llevaba trajes a medida y era el pilar que mantenía unida a la banda, especialmente a Jagger y Richards, siempre a la greña. ¿Cómo iban a seguir sin él?

alternative text
Una relación especial. Keith Richards con Charlie Watts, el batería que falleció en 2021.| Getty Images.

Keith Richards tenía una gran amistad con Watts, y lanza un profundo suspiro cuando le pregunto por él.

–Todavía no lo he superado, sigo en ello. Charlie era muy importante en mi vida. Y en la de los Stones. Solo te das cuenta de lo importante que es alguien cuando se va. Ha dejado un vacío enorme. Lo lleno hablando con él.

–¿Habla con un muerto?

–Sí. Me pregunto: ¿qué pensaría Charlie de esto o aquello? Teníamos charlas interminables, y las mantenemos. Charlie está muy vivo en mi interior.

–¿Y la eterna rivalidad entre Richards y Jagger? ¿Está enterrada?

–Me ha alegrado mucho verlos juntos. Si no hay comunicación entre ellos durante mucho tiempo, la cosa se vuelve más complicada. Y no es eso lo que queremos. Tienen que trabajar juntos. Siempre intento juntarlos. Y esta vez, por suerte, ha habido una buena conexión entre ellos.

«Todavía no he superado la muerte de Charlie. Teníamos muchas charlas interminables y todavía las tenemos. Charlie está muy vivo en mi interior»

Keith Richards

Watts había tomado precauciones por si pasaba lo peor. Y lo hizo en forma de Steve Jordan, un batería estadounidense de 66 años. «Charlie le dio su visto bueno», cuenta Wood. «Dijo: puede tocar él hasta que yo esté mejor. Y, si eso, os lo quedáis. Me gustaría que fuese él quien enarbolara el estandarte».

Los Stones han seguido tocando juntos estos últimos años, pero no habían grabado un disco. Como Jagger tenía mucho material, Wood pensó que lo mejor era que alguien de fuera hiciera de árbitro y los ayudara a decidir qué era bueno y qué no. «Le pregunté a Paul McCartney si sabía de alguien», dice. Y les recomendó a Andrew Watt, un productor que había trabajado para Miley Cyrus y Justin Bieber y producido el último disco de Iggy Pop.

alternative text
Los reyes del 'glamour'.Mick y Bianca Jagger en los años setenta, cuando eran la pareja de moda y el acercamiento de Jagger a la alta sociedad lo distanció de Keith Richards.

Pero eso no quiere decir que haya sido sencillo. Al fin y al cabo hubo un tiempo en el que Keith Richards dormía con un revólver debajo de la almohada... En su autobiografía cuenta que en los años salvajes, los setenta, ahuyentaba de las fiestas a los invitados disparando al suelo de la habitación del hotel; y Kate Moss contó que le vio persiguiendo con un sable a un invitado a la boda de su hija porque había cogido unas cebollas de la cocina.

«No, no somos héroes. El verdadero héroe tiene que estar 24 horas al pie del cañón. Como Zelenski, que todas sus decisiones son a vida o muerte. Nuestro heroísmo es 'fake'»

Mick Jagger

–¿Ha vivido usted por la espada, como reza el título de una de sus canciones?

Richards responde con brusquedad.

–Si quiere saber algo sobre las letras, pregúntele a Mick Jagger. Yo me limito a hacer los riffs. Sí, lo dice así, con nombre y apellido: «Mick Jagger». Solo falta que le ponga el «sir» delante.

A Jagger, por su parte, no le cuesta nada hablar de «sus» canciones. Y de «su» álbum. Hay cosas que no cambian nunca, y mucho menos a ciertas edades.

Keith Richards y Mick Jagger son una de las parejas de hombres más importante de la historia de la cultura occidental, quizá comparable solo a otras como Marx y Engels, y Lennon y McCartney. La historia de dos chicos que habían ido al mismo colegio y que se reconocieron como almas gemelas en una estación de tren. Pero aún faltaba un ingrediente.

alternative text
Larga vida al Rock'n'Roll.Los Rolling Stones en 1964, cuando todavía estaba con ellos Brian Jones –fundador del grupo con Jagger y Richards–, que falleció a los 27 años.

Al frente de este grupo de jóvenes hubo otro nombre: Brian Jones. Un músico con talento y complejo que tocaba todos los instrumentos imaginables. Mujeriego empedernido, ya tenía tres hijos cuando conoció a Jagger y Richards. Fue Jones quien le puso el nombre al grupo. También quien introdujo a Anita Pallenberg, la futura 'reina oscura' de los Rolling. Anita empezó como pareja de Jones y acabó con Richards.

Tres machos alfa eran demasiado para la banda. Así que, cuando Jagger y Richards empezaron a escribir canciones juntos, Jones se sintió excluido, empezó a descontrolarse y tuvo que dejar la banda. Murió ahogado en extrañas circunstancias en la piscina de su casa. Tenía 27 años. Fue el primer muerto del llamado 'club de los 27'. En un intervalo de dos años fallecieron Jimi Hendrix, Jim Morrison y Janis Joplin.

Brian Jones es una figura fundacional casi olvidada, en parte porque la fase más fructífera y desquiciada de la banda comenzó precisamente cuando faltó él. Fueron los años entre 1968 y 1972, en los que grabaron Let it bleed, Sticky fingers y Exile on Main St. Y cuando empezaron a apuntar las fricciones. Jagger, recién casado con Bianca, había llegado a la cima social, y Richards miraba con desagrado su deseo de formar parte de la alta sociedad mientras él se hundía en el cenagal de la heroína.

alternative text
La musa. Keith Richards con Anita Pallenberg, 'musa' del grupo, en 1969. Anita fue pareja de Richards y de Jones.| Getty Images.

Muchos de aquellos conciertos acabaron en batallas callejeras o conflictos con la Policía. Convertidos en los héroes de una nueva época, no dejaban de protagonizar escándalos y dejar cadáveres. Prueba de ello es el documental Cocksucker blues, grabado durante la gira por Estados Unidos de 1972 y que nunca llegó a proyectarse. Hoy por hoy, la película solo puede verse bajo ciertas condiciones. Sus imágenes siguen siendo muy impactantes por la decadencia que muestran, el desaforado consumo de drogas, la presencia de mujeres desnudas y el sexo en público. Según asegura Lesley-Ann Jones, biógrafa del grupo, Jagger habría mantenido relaciones sexuales con cuatro mil mujeres. Muchas de ellas se llevaron un buen recuerdo. Pero, desde luego, no todas.

Keith Richards escribió un libro titulado Vida, una de las mejores autobiografías publicadas por un músico. Un libro en el que habla del hijo que lo avisaba cuando se acercaban a la frontera para que pudiera meterse un chute antes de deshacerse de la droga. Un libro en el que habla de la relación rota con Anita Pallenberg, tan adicta a la heroína como él. Y de la niña que la pareja perdió, un bebé que murió de forma repentina en 1976 y cuyo fallecimiento nunca llegó a esclarecerse completamente.

«Tío, he sido muy afortunado. He tocado con toda la gente a la que admiraba de joven. Quizá es un sueño, ¡pero, por favor, no me despierten!»

Keith Richards

Los Stones inventaron el concepto de estrella del rock, una de las figuras heroicas de nuestro tiempo. Pero el triunfo no es la única forma de llegar a ser un héroe. El viaje a veces implica dolor, muerte... y remordimientos. ¿Qué piensa un Rolling Stone de todo esto? ¿Se ve como un héroe?

Ron Wood es el primero en enfrentarse a la pregunta. Lleva en los Stones desde 1975. Es el hombre en la sombra, pero sin el que nada funciona.

–¿Se ve como un héroe? ¿Se arrepiente de algo?

–El motivo por el que esta banda sigue existiendo es que nos damos cancha. Escuchamos. Por eso, cuando nos juntamos, el resultado es mucho mejor, más creativo. Y, una vez que hemos creado algo –¡el monstruo!–, ya podemos retirarnos otra vez. Nuestro nuevo álbum es nuestro nuevo monstruo. Lo amamos.

Obviamente, su respuesta no se ajusta a la pregunta, pero dice mucho sobre cómo los Stones ven lo que hacen. Ahora le toca el turno a Jagger.

–¿La estrella del rock es un héroe?

–Es un héroe fake. No vives así, no eres esa persona, es solo un papel que interpretas. Los verdaderos héroes no se toman descansos. El verdadero héroe tiene que estar 24 horas al pie del cañón. Yo no estoy en la misma tesitura que un héroe homérico. O que Zelenski, el presidente ucraniano. Todas las decisiones que toma Zelenski son a vida o muerte. Su día es así. Son decisiones a las que nosotros no nos enfrentamos. O sea, contestando a su pregunta: no, no somos héroes.

Una respuesta interesante. Porque la lucha que encarna Jagger tiene algo de heroico: vivir como a uno le da la gana. Él arrancó a la sociedad de mitad del siglo pasado el derecho a no seguir sus normas. Puso en valor la idea de que está bien hacer lo que uno quiera. Tocar la música que uno quiera. Decir lo que uno quiera. Tomar las drogas que uno quiera. Irse a la cama con quien uno quiera.

Por último, Keith Richards.

–¿Es usted un héroe?

–Yo siento como si estuviera soñándolo todo. Deseas algo y, de repente, lo tienes. No es una cosa a la que le des muchas vueltas, simplemente ocurre. Quizá es un sueño, ¡pero, por favor, no me despierten! Prefiero seguir soñando. He tocado con toda la gente a la que admiraba de joven, con Chuck Berry, con Muddy Waters. Tío, he sido muy afortunado.

–Pero ser un héroe no significa solo haber visto la luz, sino también la oscuridad.

–Oh, sí. Está muy muy oscuro ahí abajo. Pero tienes que cargar con todo. Y hay luz al final del túnel. En Nueva York lo llaman Nueva Jersey.