Paco Cano Villa
Cieza, 29 de diciembre de 2023
Siempre al servicio de todos sus vecinos
C. Caballero
Cieza despidió hace unos días a uno de sus vecinos más queridos, a Francisco Cano Villa, cuya vida laboral transcurrió como empleado de banca en la desaparecida entidad financiera Cajamurcia, llegando a dirigirla en la localidad varios años.
Paco Cano era amable, sensible, cariñoso y servicial. Confidente, comprensivo, receptivo, inconmensurable persona para todo lo bueno que se pueda decir. Era el mejor amigo para cualquiera en los peores momentos. Pero también aquel que reconfortaba con su presencia en tiempos de felicidad.
Abría su casa a todos, nadie era mal recibido, ni siquiera a aquellos que alguna vez aprovecharon sus debilidades para hacerle daño. Paco sabía perdonar. El rencor no formaba parte de su ADN y supo demostrarlo.
En su faceta como radioaficionado, Paco era la estación emisora EA5QH, inconfundible voz de la que muchos aprendieron. «Cuántas noches de radio, de buena conversación a través de las ondas junto a otros tantos y tan buenos radioaficionados que ya no están entre nosotros», comentaban hace unos días sus compañeros. Sin duda, Paco fue un nexo de unión de todos, el capitán durante mucho tiempo.
Ello le llevó a dirigir la Red de Radio de Emergencia -Remer- durante algún tiempo y a emprender muchas de las iniciativas de ayudan a los ciudadanos en situaciones de riesgo para la población, poniendo a disposición de las autoridades todos los medios de los que disponía, así como una amplia red de colaboradores que siempre estuvieron a su lado. También importante fue su trayectoria en el grupo de espeleología de la OJE de Cieza, con quien descubrió la Cueva del Puerto, en Calasparra, en 1967.
En los últimos años, Paco decidió dedicarse por entero a su familia, con su esposa, Conchita, como principal aliada, a sus hijos y a sus nietos. También quiso dejar aflorar sus sentimientos más profundos en una desconocida faceta suya como escritor y poeta a través de las redes sociales, donde dedicaba palabras de aliento a muchos de sus amigos.
Paco fue, es y será una persona irrepetible y, aunque él mismo dijera mucho aquello de que ‘nadie es imprescindible’, él sí lo fue mientras vivió y su impronta costará mucho reponerla. .
Descanse en paz.