Juan José Larrotcha Fuentes

Otras localidades, 7 de junio de 2024

Juan José Larrotcha Fuentes 'in memoriam'

JUANJO LARROTCHA MARTÍNEZ-CARRASCO

Personalmente, son muchas las bondades que debo agradecer a la vida; pero si tengo que destacar una, esta sería la de haber tenido la fortuna de nacer en el seno de una familia que, con todas las dificultades a las que se enfrentan normalmente las familias numerosas, ha permitido tanto a mis hermanos como a mí crecer y desarrollarnos como personas en un entorno de cariño, protección y respeto.

Hace unos días perdimos a uno de los dos pilares de esta familia, Juan José Larrotcha, mi padre. Hago referencia en primer lugar a esta condición porque creo que, si él tuviese que elegir uno entre cualquiera de los éxitos conseguidos en su vida, no dudaría en señalar que su mayor logro fue el de poder haber sido un buen padre, hijo y esposo.

Mi padre fue un hombre bueno y justo; honesto y generoso. Una persona de fuerte carácter, pero al tiempo de gran sensibilidad y afabilidad en el trato; de sólidas convicciones éticas y religiosas. Abogado de profesión y vocación, desarrolló también su labor profesional al servicio de la Administración Pública. De primera mano pude comprobar el interés y la dedicación que ponía en cada uno de sus asuntos, consciente de la importancia que el devenir de estos tenía para sus clientes. Nunca antepuso su interés a la voluntad de servicio a los demás, no permitiendo que nadie perdiese la posibilidad de reivindicar una pretensión justa por cuestiones meramente económicas.

Pero si hubo una pasión, más allá de su familia, que marcó su existencia desde la más temprana infancia fue el amor por los libros. A través de ellos se abrió a la vida y se introdujo en la literatura universal, formó sus valores personales, imaginó mundos diferentes, alimentó con conocimiento su espíritu... El libro como objeto de culto y de transmisión de experiencias. Ello le llevó a construir a lo largo de los años una magnífica biblioteca, abundante en títulos y variada en temas, que constituyó su refugio en los pocos momentos de descanso que le permitían sus obligaciones laborales y familiares. Junto a ello, el cine, la música, en resumen, el arte en todas sus manifestaciones fueron también fuentes que alimentaron su vasta cultura. En estos días luminosos que anuncian el verano, nosotros, su familia, tratamos de procesar su ausencia, pero celebramos también el hecho de haber podido ser parte de su vida, una vida que seguirá por siempre siendo un referente de las nuestras.

Hoy, viernes 7 de junio, su familia y amigos tendremos un recuerdo para él en la parroquia de San Francisco de Asís (P. P. Capuchinos) a las 20.00 horas.