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Un último brindis por el padre del Derecho Ambiental

Murcia, 23 de mayo de 2014

Obituario. Ramón Martín Mateo

Resulta difícil expresar en unas pocas líneas toda la dimensión de la huella que nos ha dejado la figura de Don Ramón Martín Mateo. Su legado para los juristas y, más allá, para toda la comunidad universitaria es amplio y generoso.


Como padre, sin duda, del Derecho Ambiental en España ha creado una escuela de múltiples discípulos que han heredado su entusiasmo y lo propagan en España y en todo el mundo, en especial en Latinoamérica. Autor de múltiples obras de referencia en la disciplina siempre destacó por su perspectiva vanguardista y tratamiento novedoso de los temas objeto de investigación.


Como rector de la Universidad del País Vasco desempeñó un papel fundamental en la consolidación de aquel proyecto universitario en tiempos bien difíciles cuando todavía los ataques terroristas eran diarios. Como rector de la Universidad de Alicante propició la construcción del campus de San Vicente, ejemplo de urbanismo racionalista y de concepción moderna de lo que debe ser el espacio universitario. Fue valiente en la defensa de la autonomía universitaria frente a las crecientes injerencias del poder político autonómico.


Como investigador siempre pendiente de los avances científicos y tecnológicos, Don Ramón se definía a sí mismo como un «ingeniero social bienhumorado», convencido del esencial papel del Derecho como instrumento de resolución pacífica y justa de los conflictos sociales, lejos de interpretaciones formalistas leguleyas.


Como ciudadano de talante liberal y conciliador, alejado de cualquier dogmatismo radical, fue además muy crítico con el urbanismo depredador y desarrollista que, durante los últimos años, ha acabado con muchos de los paisajes a los que se sentía íntimamente ligado. En especial, de la costa alicantina donde residía y que con tanta amargura vio transformarse por la voracidad del ladrillo. El ya nos advirtió sobre los peligros de la «gallina de los huevos de cemento» y la irreversibilidad de los daños ambientales.


Estuvo Don Ramón ligado a Murcia y a su Universidad por profundos lazos académicos y afectivos. Muchos de sus profesores, en especial de Derecho Público, han defendido sus tesis doctorales y han obtenido sus plazas en comisiones presididas por él. Siempre tenía una palabra tranquilizadora para el candidato y una broma preparada para romper la tensión, por momentos excesiva, de estos actos universitarios. La Universidad de Murcia le rindió debido reconocimiento y homenaje como doctor 'Honoris Causa' en 2012. Hoy aquel acto íntimo y emotivo se convierte en una despedida del querido Maestro.


Optimista, irónico, humanista, ingenioso, sagaz, divertido&hellip amigo de las buenas costumbres y de la buena vida. Un emocionado brindis por ti, querido Don Ramón.