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Un sacerdote bueno y un gran amante del diálogo

Archena, 11 de enero de 2019

Obituario Antonio López Baeza

Antonio López Baeza, conocido cariñosamente como 'El Jarrero', nos dejó ayer a los 82 años en su casa de Archena. Fue una de las personas más queridas y apreciadas del municipio por su dedicación incansable a la cultura mística y espiritual y por su labor como sacerdote. Se hizo acreedor del título de Hijo Predilecto de Archena. Pero en ese viaje hacia lo eterno deja un largo camino lleno de recuerdos, pues son muchos los libros que escribió, algunos con títulos tan significativos y profundos como 'La vida más allá del sentido', 'Un camino en lo imposible', 'Queda el amor' y 'Canciones del hombre nuevo'. Su legado también dejó otras obras con un carácter más espiritual, como 'La oración, aventura apasionante' y 'Por una iglesia al servicio de mundo'. Y así hasta completar varias decenas de obras publicadas, algunas de ellas escritas en verso, un género este que le encantaba y que recitaba con una enorme generosidad artística en los certámenes que la Asociación Literaria ofrecía.


Le conocía desde mi infancia, pues fui monaguillo cuando él estudiaba en el seminario, y siempre observé su carácter afable, simpático y cercano a las personas de su alrededor. Tenía una personalidad íntegra y unas ideas muy claras sobre la vida y la humanidad. Amaba el diálogo. «Somos lo que damos y lo que recibimos. Ambas cosas al unísono. Solo se pierde irremisiblemente lo que no se comparte», comentaba.


Al terminar sus estudios fue ordenado sacerdote el 25 de septiembre de 1965 en la iglesia de San Andrés Apóstol de Murcia. Entre 1965 y 1968 estuvo en la parroquia La Purísima de Yecla. Después fue cura ecónomo de la parroquia de San Leandro de Cartagena, y más tarde en San Pedro Pescador de la misma localidad. Los siguientes años estuvo al frente del templo cartagenero de la Inmaculada Concepción, para después trasladarse a Nuestra Señora de la Paz, en Murcia, seguir en la parroquia de la Esperanza y después en la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, en Puente Tocinos.


Además, desempeñó otros cargos. Fue miembro del Consejo Presbiteral, profesor de Religión en la Escuela de Maestría Industrial de Cartagena y también docente en la Escuela Universitaria de Profesores de EGB en Murcia. Sus restos mortales son velados en el Tanatorio Valle de Ricote de Archena. La misa será presidida por el obispo de Cartagena, hoy, en la parroquia Corpus Christi-La Purísima del municipio, a las 11.30 horas.