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Don José Antonio Rocamora Vidal

Murcia, 25 de febrero de 2017

Obituario José Antonio Rocamora Vidal

No pudo resistir tu corazón tantos achaques en tampoco tiempo, y es que, pese a que nunca lo expresaras en público, las dos pérdidas de familiares acontecidas en los dos últimos años habían golpeado de manera muy fuerte tu ya frágil corazón haciéndolo aún más añicos. José Antonio Rocamora Vidal nació el 9 de septiembre de 1950 en Lorquí, donde pasó su adolescencia. A finales de los años 70 se casó en Ceutí con Isabel García Baño, creando una familia.


De carácter discreto, siempre creía en sus proyectos, los cuales defendió con esmero, conocimientos y sentido crítico. Su carrera profesional estuvo ligada a la actividad empresarial, donde fue propietario de una firma de suministros industriales y otra de acero inoxidable. En los últimos años, junto con sus hijos, se había embarcado en endulzar la vida a los murcianos, al introducir en la capital, en la plaza Díez de Revenga, un negocio de rosquillas americanas, los famosos donuts.


En esta céntrica plaza pasó sus últimos años de su vida, ganándose el cariño de sus vecinos y comerciantes de alrededor. Era muy común verlo departiendo con ellos o con los taxistas que tenían parada justo delante de su local. Tampoco el destino ha querido que vieras abierta la nueva tienda, en El Tiro, pues fuiste hospitalizado unos días antes para someterte a una operación de la que ya nunca llegaste a recuperarte.


Era un apasionado del Barça, al que defendía con la misma convicción y pasión que a su Ceuti Atlético, club deportivo de su pueblo, que tuvo el honor de presidir y llevar a las categorías más altas de la Región. Bajo su presidencia vivió sus años dorados. Otra de sus pasiones, que compartía junto a su mujer, era la de viajar. Juntos han recorrido muchos y lejanos lugares. Nos contabas tus viajes con todo lujo de detalles y nos los hacías vivir con la misma pasión con la que los habías disfrutado. El destino ha querido que tu muerte me pille muy lejos, pero no por mi ausencia a tu funeral, ayer en la iglesia de la Magdalena, tu deceso es menos sentido para mí.


Has emprendido un nuevo viaje que seguro te llevará a un buen lugar, dejándonos desolados a todos los que hemos formado parte de tu vida. Te has ido muy pronto, pero nos has dejado un buen legado con el que trataremos de cicatrizar la herida que nos ha dejado tu partida. Descansa en paz.